Hoy os traemos el tercer post de esta serie donde algunos creadores a los que admiramos nos cuentan sus rutinas creativas y cómo se están organizando durante esta etapa.
Esta es la tercera entrega de esta primera serie de “Rutinas creativas”, lo que en principio pensamos como un solo post tuvo tan buena acogida por parte de todos, que decidimos dividirlo en tres partes y que así todos tuvieran más protagonismo y vosotros pudierais disfrutarlo en pequeñas dosis.
Seguiremos contactando con creadores para que nos den sus diferentes visiones pero, de momento, os dejamos con las rutinas creativas de: una escritora, una cantante y compositora, una artista, una directora creativa de moda y un chef.
¡Comenzamos!
Sara Bueno (@sarabuho). Escritora
“Lo cierto es que no sé cómo empezar a hablar sobre mis procesos creativos. Si doy una primera pensada todo es caos, pero juro que hay un orden. Pasa una cosa, y es que trabajo en proyectos muy diferentes entre sí, y cada uno tiene su momento a pesar de que a veces se solapen; aunque hay algo que sí tienen en común y es el mood.
Nuestro contexto nos habla todo el rato, nos ofrece conversaciones, y hay que permanecer sensible para captarlas y transformar las pulsiones creativas en algo.
Muchas veces mi contexto ofrece silencio y eso me lleva a hablar conmigo misma; es entonces cuando encuentro lugar para la poesía. Otras veces, el propio contexto se queda pequeño o se extralimita y ofrece un hilo del que tirar llevándome a otros lugares; y encuentro espacio para la prosa. También a veces el espacio y la palabra se hacen uno, así que trato de captarlo en una fotografía. Si tuviera que ubicar todo esto en un momento dentro de las veinticuatro horas, diría que por la noche me llama la poesía, por la mañana la prosa y al atardecer la fotografía.
Ese estado de sensibilidad lo ejercito con lectura. También me ayuda escuchar música, ver ilustraciones, pinturas, películas, o hablar con personas que también son creativas o que sencillamente tienen esa luz que acaba inspirándote irremediablemente. Corrijo, más que hablar es escuchar y observar. Al final, vivir es lo que nos hace conectar y mantenernos inspirados. Me gusta detenerme en lo cotidiano.
Suelo trabajar desde un concepto o idea, que luego voy alimentando a medida que pongo mi energía y lo nutro. Y al contrario de lo que se suele pensar, tener una fecha concreta me ayuda a estimular la imaginación… de lo contrario tiendo a dispersarme.
Al final, vivir es lo que nos hace conectar y mantenernos inspirados. Me gusta detenerme en lo cotidiano.
En cuanto a la cuarentena, el principio lo pasé con bastante tensión y agobio por toda la situación, y eso me bloqueó bastante. Al final estoy logrando gestionar esas emociones (días mejores y días peores), y eso me ha permitido continuar con los proyectos e incluso comenzar algo nuevo. Me pilló justo preparando una mudanza con más de la mitad de mis libros y libretas en cajas y, como mi piso es muy pequeñito, todo está apilado justo en la que era mi mesa de trabajo. No hay otro sitio donde ponerlas, así que mi nuevo espacio creativo es el sofá. No me gusta que mi espacio de trabajo sea también el de ocio, y voy camino de perder parte de la espalda pero… como podéis comprobar, tengo una compañera de “oficina” muy maja.”
Descubre la poesía de Sara Bueno en su Instagram.
Bely Basarte. Cantante y compositora
“Nunca he sido de rutinas. Me cuesta hacer lo mismo cada día porque me termino aburriendo. Aunque para algunas cosas soy muy metódica, cuando se trata de crear me gusta dejarme fluir. Me gusta meterme en mi estudio, que pasen las horas y sorprenderme.
Estos días de confinamiento estoy volviendo a mis veinte, cuando toda la creatividad en mí brotaba en cuanto el sol se acostaba. Durante el día intento centrarme en mi salud mental haciendo cosas más cotidianas, videollamadas, ejercicio… Y es por la noche que me llegan las ideas y además, las ganas de llevarlas a cabo.
Es cierto que mi horario del sueño está alterado y no estoy en la cama antes de las 4am ninguna noche, pero mi alma artística está realmente satisfecha y eso es prioridad.“
Puedes conocer más acerca de Bely Basarte en su Instagram o descubrir su música a través de Spotify.
Itziar Aguilera. Artista
“Nunca he conseguido tener ningún tipo de rutina, no existía, era imposible encontrar tiempo, por eso decidí apuntarme a clases de pintura de 2 horas los miércoles, para obligarme ese rato creativo. Mi creatividad directamente murió con el ritmo de vida que tenía, no pintaba, no creaba…
Respecto a la situación actual, al principio tuve que enfrentarme a un cuarto de pintar que se había convertido en desván, lleno de caos y trastos, un poco como el rincón creativo que hay dentro de mi, abandonado. Con el ritmo que llevaba, siempre llegando tarde, con mil proyectos e ideas creativas que se aparcaban en ese desván interno para cuando encontrara un minuto.
Ordenar ese espacio me ha ayudado a aclarar las ideas y conectar de nuevo con la creatividad y conmigo misma.
Los primeros días me propuse ordenar ese rincón, tanto el palpable como el interior, lo hice por días y poco a poco. Este cuarto antes era inhabitable, y con el paso de los días empecé a pasar más tiempo en él, no sólo ordenando. Lo primero que me animé a hacer fue arcilla, tenía muchas ganas, llevaba meses guardando esos sobres y con ganas de estrenarlos para crear algún objeto…
Un libro que me ha ayudado mucho en este proceso, y ha llegado a mi de forma casual (pululaba por casa desde hacía años, lo empecé y abandoné varias veces) “Piensa como un artista” de Will Gompertz, me ha acompañado en este torpe pero constante reencuentro con mi “yo” creativo.
Experimentar, mezclar colores, combinar técnicas, dedicar mucho tiempo, reflexionar, hacerse preguntas, aprender de otros… este confinamiento ha conseguido que cada día pase tiempo en este cuarto conmigo misma, y en vez de un obstáculo he conseguido visualizarlo como una oportunidad. Ordenar ese espacio para aclarar las ideas y conectar de nuevo con la creatividad y conmigo misma.”
Si no has descubierto ya a Itziar Aguilera, puedes seguir su trabajo en Instagram.
Ana Carrasco. Directora creativa de Malababa
“Mi particular ciclo creativo lo tengo controlado y como tengo habitualmente poco tiempo me suelo organizar para cumplirlo.
En principio yo necesito destinar 48 horas, dos días, en la mayoría de los casos, ese es el tiempo óptimo.
Ambos días me levanto pronto y me dejo llevar, el primero hago cosas que me apetezcan, leo, ordeno, reviso ideas que se han quedado por ahí y ese mismo día por la tarde ya empiezo a dibujar pero son días en los que necesito desconectar de verdad y no hacer ninguna otra cosa, me meto en mi mundo de Lalala y de buen rollo y me dejo llevar sin barreras, no suelo ni coger el teléfono. El segundo día suele ser muy productivo porque veo todo con más claridad y ya estoy en el mood. Le dedico muchas horas, creo firmemente en la frase de “Que la inspiración te coja trabajando”.
“Mi ciclo creativo para desarrollar una idea dura 48h. Ambos días me levanto muy pronto y desconecto de todo, no estoy para ninguna otra cosa. Me meto en mi mundo y me dejo llevar sin barreras”
Por lo general en los primeros días de la colección me voy montando la paleta de color que normalmente viene de alguna vivencia que haya tenido en los últimos meses, vivimos en Madrid y la actividad cultural es enorme, los fines de semana solemos acudir con los niños o solos a hacer algún plan cultural o me escapo con Jaime y de ahí salen muchas cosas.
Mis dibujos van acompañados de muchas anotaciones, parecen más los dibujos de otra profesión, bueno no considero que seamos “moda” así que tiene sentido.
Otra cosa que a mi me parece importante es que yo diferencio totalmente el proceso de creación del de desarrollo, se puede decir que el segundo consume el 80 % de la generación de una pieza y ese proceso ya lo llevo a cabo en nuestro propio taller y así voy viendo la parte técnica, las materias primas, etc..
En la colección que hemos lanzado ahora por ejemplo, la inspiración fueron los veranos baleares de los años 70 principios de los 80. Todo vino por una exposición de arquitectura mediterránea, las nuevas corrientes empezaron a llegar a principios de los 50 y se empezó a construir diferente. Basándome en eso me imaginé quienes vivían en esas casas, su actitud y que arte y colores formarían parte del imaginario de esa época y por supuesto la actitud con la que se vivían esos veranos.
Ahora en estos momentos, lo difícil es poder aislarme y como nosotros trabajamos entre semana todos los días y los niños tiene colegio conectados, trato de hacerlo el sábado y el domingo. Nos lo tomamos más relajado y no hay distracciones externas, no hay llamadas hasta el lunes, así que esos son mis días de creatividad.
Descubre más sobre el universo de Ana en su Instagram personal y en su maravillosa marca Malababa.
Ángel León. Chef
“Siempre que nos hablan de creatividad parece que a los cocineros nos ponen en un laboratorio, ahí esperando a que venga el Ángel Custodio a darnos la idea.
En mi caso, la creatividad la saco todos los días desde que me levanto por la mañana escuchando a muchísima gente anónima, maravillosa, que tiene un montón de cosas que contar y quizá ahí me inspire a muchísimas cosas, ya sean biólogos, pescadores, cocineros, amigos… Tener dos orejas para escuchar es lo más importante.
Yo creo que ahora mismo son momentos en los que la creatividad, la verdadera creatividad, en mi caso, la tuve que aparcar porque me estaba volviendo loco dándoles vueltas a la cabeza en cómo reinventarme cuando todo esto acabara. Porque al final puedes incluso dañar a la mente si no sabes dónde llevar el foco de tu cabeza hacia otras cosas. En mi caso, la vuelta a la normalidad va a ser bastante complicada.
Respecto a la creatividad, mucha gente está dando como un paso atrás. Y creo que tiene que ser al revés, tendremos que ser más creativos porque lo que va a dominar el mundo va a ser el alma, el corazón y las cosas con pureza.
Ángel León
Yo tengo la suerte de refugiarme en el mar y he tenido la suerte de olvidarme de mí, de mis problemas, de todo, y me he puesto a cocinar para gente a la que le hace falta para comer. He abierto “El molino de A poniente” y estoy ahí con voluntarios cocinando, intentando mantener mi cabeza en cocinar simplemente y no en crear, si no en simplemente dar de comer. Siempre he dicho que para que haya creatividad uno necesita tener necesidad, sin necesidad no hay creatividad. Y es curioso que en el momento en el que yo supuestamente debería de estar más creativo, de cara al futuro de mi negocio, no lo estoy, porque entiendo que no voy a dar un paso atrás en lo que hago y en la propuesta que me ha costado tantos años hacer, si no que pretendo reforzarla e incluso ser más atrevido en todo lo que hago.
Así que ojalá pase esto pronto. Yo creo que es un tiempo de cambio, de necesidad, habrá mucha creatividad y tendremos que reinventarnos todos.”
Muchísimas gracias a todos. Ha sido un auténtico placer teneros en Hello! Creatividad para hablar de vuestras rutinas o no rutinas.
¡Y hasta aquí esta primera serie de post de Rutinas Creativas! Esperamos que os hayan inspirado todos estos creadores tanto como a nosotras. Si todavía no habéis visto el resto de rutinas creativas, os dejamos aquí la parte I y la parte II.
¡Volveremos con más!
