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Aprendiendo a aprender con Silvia Buján (@naluadulce)

Aprendiendo a aprender con Silvia Bujan: fotógrafa, amiga, madre, y una mujer que nos inspira por quién es y por la manera de vivir que tiene.

Aprendiendo a aprender con Silvia Buján (@naluadulce)

Nuestra nueva Historia de alumno es toda una clase magistral de una filosofía de vida de la que aprender. La de Silvia Buján, @naluadulce en Instagram, fotógrafa, madre y amiga. Una mujer a la que admiramos por su trabajo, por cómo crea belleza y, sobre todo, por el entusiasmo que pone en todo en su vida, sean cuales sean las circunstancias. Y no siempre han sido precisamente fáciles.

Hace casi cuatro años Silvia sufrió un infarto medular que le dejó tetrapléjica. A pesar de que el pronóstico no era bueno, nunca se rindió ante la posibilidad de mejorar sus condiciones de vida día a día. En una entrevista en directo en nuestro perfil de Instagram nos contó cómo volvió a aprender a comer, a mover la mano, a caminar… desde lo más básico, porque su cuerpo lo había olvidado casi todo. Ocho meses después, abandonaba el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo por su propio pie.

“Solo tenemos una vida, así que tenemos que sacarle el máximo partido”. En el caso de Silvia Buján, estas palabras no son una mera frase grandilocuente, sino una forma de vivir de la que ha dado cuenta y ejemplo incluso antes de este episodio en su vida. Mucho antes ya había decidido, tras el nacimiento de sus tres hijos, abandonar el mundo de la banca en el que trabajaba por algo que le llenase más: la fotografía. Y durante unos cuantos años su trabajo, de hecho, ha sido ese: fotografía de bebés, de producto e interiores. Y con éxito; aunque el mayor de sus éxitos era, sin duda, ser feliz con lo que estaba haciendo. Hoy, en sus nuevas circunstancias, se ha adaptado para no abandonar la fotografía, pero también ha explorado y aprendido nuevas pasiones que, por un lado, le están ayudando a mejorar físicamente y a la vez sentirse plenamente feliz también en esta etapa de su vida. 

A Silvia este revés no le cambió; sí cambió sus circunstancias, y su forma de afrontarlo es probablemente algo innato, pero queríamos que la compartiese, que nos contase qué le ha ayudado a alimentar esa pasión por la vida, con lo bueno y con lo malo, que nos hablase de la importancia de adaptarse, de ser capaz de ser feliz en distintos momentos o de aprender a serlo. Porque creemos que se puede aprender y, además, es muy necesario.

Os dejamos algunas de los mensajes que nos dejó: 

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1. FORMACIÓN

Admiramos a Silvia por su inquietud por aprender y formarse en cosas nuevas, y por su actitud ante la vida. Nunca ha dejado de aprender, de alimentar sus inquietudes e incluso de buscarse nuevas. Tampoco durante su estancia en el hospital, ni durante su recuperación que, como nos contó, durará toda su vida. Gracias a eso llegó, por ejemplo, a la cerámica, que le está permitiendo recuperar mucha movilidad y agilidad con sus manos. “Y lo que no puedo hacer, me invento la manera de hacerlo”. Y, al mismo tiempo, le sirve para alimentar su creatividad y espíritu, seguir creando belleza de esta manera le desconecta de todo y la conecta consigo misma, le motiva y, sí, le hace muy feliz.

“Nunca se deja de aprender ni se debe dejar de hacerlo.”

Vive esta etapa de su vida plenamente como si fuera una más, y cree que es la manera en la que debemos afrontar la vida. La clave, dice, está en adaptarse a la realidad, en ser conscientes de lo que podemos hacer en cada momento y encontrar cosas que nos sigan llenando.

2. ACTITUD

“Debemos aprender de la experiencia vital porque si no luego, ¡no sabes vivir!”

Quienes conocemos a Silvia destacamos sobre todas las cosas su actitud positiva ante la vida. Defiende y contagia con pasión la importancia de aprender de la vida misma y de cómo se nos presenta. La manera de ser feliz es disfrutando de todo lo que nos toque en cada momento, del trabajo, el cuidado de los hijos… Pero también recalca la importancia que debemos darle a encontrar momentos para nosotros, para aprender cosas que nos gusten.

Silvia nos confiesa que cuidar a sus hijos es de las cosas más complicadas a las que se ha enfrentado, porque pierdes parte de tu vida para cuidar únicamente la de ellos. Ahí es cuando empezó a valorar y a cuidar los ratitos para sí misma. Y nos anima a que todos busquemos esos ratitos, ya sea para leer, para hacer deporte o lo que sea, pero que los encontremos y los vivamos.

A día de hoy, nos cuenta que sigue aprendiendo a vivir con su nuevo cuerpo; está adaptándose. Va aprendiendo cada día un poquito más. Pero la realidad es que Silvia cree que todos podemos hacer todo, lo importante son las ganas y la constancia, ponerse a hacerlo hasta que nos salga.

“Somos unos afortunados y el problema es que no nos damos cuenta de ello hasta que nos pasa algo grave en la vida.” 

3. CREATIVIDAD

Si hay algo que cree que te permite vivir la vida al completo es la creatividad y el estar siempre dispuesto a hacer cosas nuevas. 

Así, nos contó que durante mucho tiempo tuvo la creatividad estancada. De pequeña su madre le llevaba a probar de todo: baile, a tocar instrumentos y todo tipo de actividades artísticas para que pudiera disfrutar de lo que más le gustara. Luego, cuando empezó a trabajar, dejó un poco de lado estas actividades creativas. Ahora, nos habla del la influencia que ha tenido la creatividad en sus últimos años, de cómo para ella ha sido clave a la hora de encontrar soluciones y sentido a todo. 

Desde que descubrió el abanico de oportunidades que le abrían los cursos online, no pierde la ocasión de hacer todos aquellos que le ilusionan. Para ella es súper importante fomentar a los más pequeños con creatividad, ya que considera importante crecer cuidando los detalles y trabajando la sensibilidad.

4. TIEMPO

Aprovechar el tiempo.

“Tendemos a pensar que nunca te va a pasar algo grave, porque siempre piensas que les pasa a los demás.”

Así que nos anima a no esperar a que nos pase para exprimir cada minuto al máximo. Cuando la vida te cambia para siempre te das cuenta de que de nada sirve llorar y enfadarte, no está mal hacerlo un ratito y desahogarte, de hecho nos dice que es hasta importante, pero no puedes quedarte ahí porque las cosas no se solucionan de esa manera. Solo tenemos una vida y hay que sacarle el máximo partido.

Sabiendo aprovechar lo que tenemos y siendo conscientes de los afortunados que somos seremos más felices y además nos daremos cuenta de que no tenemos derecho a quejarnos de lo que nos está pasando, porque hay gente que lo pasa realmente mal. 

5. NORMALIZAR LA DISCAPACIDAD

Por último, Silvia nos muestra la necesidad que existe de normalizar la discapacidad. Las personas que viven con una pueden vivir una vida igual de plena y feliz que la nuestra, ya que son completamente iguales a nosotros aunque nos veamos distintos. 

Debemos normalizar que, aunque haya personas con unas capacidades distintas a las nuestras, no somos diferentes, somos absolutamente iguales y hay que valorar a la gente que lucha y que tiene todavía más dificultades para hacer las cosas porque, como ella dice, son unos auténticos campeones.

“No quiero que los demás sufran por verme mal, porque no lo estoy; lucho por mí misma”

No debemos juzgar, porque no sabemos el esfuerzo que hay detrás de cada persona, pero todos tenemos pequeñas dificultades con las que luchamos y trabajamos para estar mejor. 

Os dejamos enlace al directo completo, indispensable de principio a fin:

Muchísimas gracias, Silvia, por tu generosidad.

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