Consejos para la Fotografía en Blanco y Negro

Hablamos con 4 fotógrafos para que nos den su visión o algunos consejos sobre la fotografía en blanco y negro y esto es lo que nos cuentan…

Me gusta la fotografía en blanco y negro, pues me ayuda a condensar la idea, a contar una historia y a dejar de lado otros elementos que no tienen valor para lo que intentamos transmitir.

Mientras que el blanco y negro tiende a simplificar una escena, el color distrae y, si no se usa correctamente, puede restar valor y significado a la imagen, por lo que siempre tenemos que plantearnos si el color nos aporta contenido y significado a la fotografía.

Como nos cuenta Raquel en su curso online de fotografía de personas en blanco y negro “La naturaleza de las personas”, para pasar fotografías de color a B/N se pueden utilizar filtros (en el objetivo directamente sería lo más apropiado pero también se pueden aplicar durante el procesado, emulando con Photoshop filtros de color).

Lo que hace el filtro es aclarar los colores de su gama tonal y oscurecer los de la complementaria.

Esta imagen es una excepción, es uno de mis primeros retratos. Lo hice en color y con flash, un flash muy normalito, el que tenía la canon EOS 600D incorporado, posteriormente le apliqué un filtro azul (los filtros aclaran su propio color y oscurecen su complementario) al procesarlo en Photoshop para acentuar los blancos y las pecas, el filtro azul aclara los azules y oscurece los amarillos, naranjas, ocres, en este caso: la piel. Gracias al filtro el contraste se acentúa y con este también los detalles.

Normalmente el filtro azul es muy agresivo en los rostros y produce una sensación extraña e irreal, el truco consiste en utilizarlo en imágenes muy iluminadas, como en esta con flash, en otro caso os recomiendo el filtro verde y jugar con su intensidad dependiendo del resultado.

Normalmente tomo las fotos muy contrastadas, pero esta la hice con una pared blanca de fondo y otra también blanca a mi espalda. No había luz directa ya que el sol estaba oculto por la pared de fondo, y la pared a mi espalda funciona perfectamente como un reflector natural iluminando el rostro. Como no me gusta el flash, este tipo de iluminación da muy buen resultado si no quieres sombras ni fuertes contrastes.

Utilicé un filtro de color verde en el procesado en blanco y negro para resaltar los rasgos, por eso aparecen los labios tan oscuros.

Me encanta el blanco y negro. No sé si sé explicar por qué, pero me encanta. Decía Ted Grant que “Cuando fotografías a una persona en color, fotografías su ropa; cuando lo haces en blanco y negro, fotografías su alma”. Creo que esta frase, que puede parecer muy profunda, es totalmente cierta, nos cuenta la fotógrafa Cristina Díaz.

Me gusta su poder de hacer una foto atemporal. La atmósfera que transmite. Ese punto de nostalgia y melancolía que no se suele conseguir con el color. Cuando vemos una foto en color, es fácil identificar en qué época se tomó: cuando la vemos en blanco y negro, esa tarea se complica.

Me gusta su poder de síntesis, de simplificación, de eliminar distracciones. Sin el color, las fotos adquieren una fuerza mucho más potente, pues, eliminando la distracción más importante, el mensaje llega al espectador sin desvíos, sin obstáculos.

Pero también me gusta por pura estética. Las fotos en blanco y negro son más sintéticas, más minimalistas, más sencillas. Me gusta cómo se ve la luz en blanco y negro, el contraste…

¿Mi tarea pendiente? Ser capaz de “ver” en blanco y negro, de “pensar” en blanco y negro. Es como cuando estás aprendiendo un idioma, dicen que hasta que no sueñas en ese idioma no eres verdaderamente bilingüe, ¿verdad? Yo quiero eso con la fotografía en blanco y negro. Si, ante cualquier escena, eres capaz de “ver” la foto en blanco y negro, lo que ves es lo realmente importante en una fotografía: la composición, la luz y el contraste.

Por lo tanto, mi teoría es que “pensar en blanco y negro” ayuda a ser mejor fotógrafo.

“En realidad creo que en general me atrae más la fotografía en color, pero hay algunas imágenes que las pienso desde el principio en blanco y negro o que funcionan mejor en monocromo, ya sea por ese punto atemporal, antiguo y cinematográfico que aporta o porque me permite eliminar las distracciones que a veces el color puede producir en una escena y centrarme en enfatizar la atmósfera o la emoción que contienen. En una fotografía en blanco y negro, la composición es más protagonista, pero simplificamos los elementos que pueden restar fuerza y dramatismo a la imagen, dice Mary Wilson.

A la hora de procesar en monocromo, soy partidaria de los altos contrastes: que los blancos sean blancos y los negros, negros, siempre evitando las zonas quemadas y/o empastadas, con una escala de grises más o menos completa. Por eso suelo subir el contraste al máximo y a continuación, revisar las luces para no perder información por exceso ni por defecto. Si aún así, la imagen está demasiado “lavada”, subo un poco los negros para darle ese “punch” que necesitan las imágenes.”

Al fotógrafo francés Alain Laboile por su parte le gusta disparar en color, aunque la mayor parte de su obra esté desarrollada posteriormente en blanco y negro.

Sus fotografías tienen siempre composiciones muy equilibradas, que a simple vista pueden no percibirse pero que cuando el propio autor te las explica en su curso de Storytelling fotográfico, descubres un sin fin de detalles con los que disfrutar y que sin duda te hacen pensar más allá a la hora de crear tus propias fotografías.

Tiene una forma muy particular de editar sus fotos, haciendo que sean fácilmente reconocibles por su tono cálido en blanco y negro.
En su curso online de fotografía en blanco y negro nos explica paso a paso cómo es su trabajo de edición de fotografías tanto en color como en blanco y negro, del que os dejamos unas pautas sobre su trabajo de edición.

• Comienza siempre trabajando en Cámara Raw, donde hace unos primeros ajustes de exposición, contraste, tonos claros y oscuros, los blancos…

• Seguidamente abre la foto en Photoshop, donde va equilibrando los niveles por capas.
  Busca siempre que no haya zonas ni muy claras ni muy oscuras y cuida al máximo que todos los pequeños detalles, incluso aquellos que pasan desapercibidos a simple vista, estén ajustados. Si hay zonas muy oscuras, las aclara, y viceversa. Para él, ahí es donde reside también el valor de una buena fotografía, en cuidar todos y cada uno de los rincones de la imagen. Trata cada una de sus fotografías como auténticas obras de arte.

• Añade un poco de grano a sus fotos casi de forma sistemática, para “conseguir atenuar el aspecto numérico de las imágenes”.

• Una vez hecho esto, vuelve a pasar su imagen a RGB.

• Y por último… aplico algo de calidez en el conjunto de la imagen utilizando la herramienta “Balance de color”. Esta es la única acción que repito en todas mis imágenes, y que tengo automatizada con un “Script” para garantizar la homogeneidad del conjunto de mi producción fotográfica.

Os resumimos algunos de los consejos sobre la Fotografía en blanco y negro que hemos visto en el post:

• Utiliza los filtros de color, a ser posible en la cámara; si no, recuerda que siempre puedes utilizarlos en postproducción;

• El filtro te permite aclarar los colores de la misma gama tonal y oscurecer los de la contraria;

• Intenta darle el mismo acabado a todas tus fotografías para darle homogeneidad a tu trabajo fotográfico;

• La fotografía en blanco y negro te permitirá reducir distracciones en tus fotografías;

• Si fotografías en exteriores, los cielos con nubes te permitirán dar más dramatismo a tus fotografías;

• Blancos y negros muy contrastados siempre quedan bonitos, pero hay que intentar no perder información en la escala de grises.

Si como nosotras, tú también eres un gran fanático de la fotografía en blanco y negro, no dejes de echar un vistazo a nuestros cursos de fotografía online con Alain Laboile y con Raquel Chicheri.