La búsqueda de un estilo propio dibujando es algo que todo artista desea, pero tener un estilo muy marcado y reconocible al inicio de la carrera (profesional o no) de un dibujante es muy difícil. Poder decir que tus trabajos son reconocidos sin que firmes en ellos es algo que se debe ir trabajando y fortaleciendo con el paso del tiempo.
En este post vamos a darte algunos consejos para ayudarte a recorrer ese camino.
Tip
1. ¿Qué implica tener un estilo propio?
El estilo es, básicamente, nuestra marca. Es la manera de llegar a las personas y de ser recordado. Es la forma que tenemos de dejar nuestra huella en los demás como artistas. Que una creación se vea que es nuestra; que se pueda reconocer al instante como la obra de X persona.
Si eso nos sucede con muchas de las personas que ven nuestros dibujos, podremos decir claramente que hemos alcanzado el objetivo.
Ilustración de @alex.demarcos
2. Consejos para desarrollar una voz propia dibujando
Debes entender que desarrollar un estilo propio, realmente único, personal y muy marcado, no es algo que se haga de un día para otro, sino que se va desarrollando a medida que recorremos nuestro camino como artistas y vamos adquiriendo nuevos aprendizajes y experiencias que nos hacen evolucionar.
Es imposible encontrar un estilo personal maravilloso de repente y de la nada; debemos ir dándole forma muy poco a poco. Y eso es lo bonito del camino que se recorre: al echar la vista atrás llegará un día en el que tú mismo te des cuenta de que has desarrollado ese estilo que tanto buscabas.
Estos son algunos consejos o trucos para conseguir desarrollar un estilo propio que nos identifique rápidamente. ¡Toma nota!
A. Inspiración
La creatividad no nace de la nada. Necesitamos inspirarnos y tener todos los referentes posibles.
Ir desarrollando un estilo no quiere decir que despreciemos el arte de otros. Hay que tener formación y técnica y, además, investigar el trabajo de otros artistas (incluso alejados de nuestra rama artística). Es decir, si eres un dibujante, también se puede aprender del trabajo de pintores o fotógrafos, o incluso de disciplinas todavía más alejadas. Es bueno para inspirarse.
¿Cuántas obras de arte magníficas se han inspirado en otras o en autores referentes? Muchas, ¿verdad? No tiene por qué afectar a la hora de conseguir darle nuestro sello personal a una creación. Inspirarse y tener referencias no es copiar.
B. Diario de a bordo
Puede serte de gran ayuda tener siempre un diario de a bordo, un lugar donde hacer garabatos o apuntar ideas.
Al hilo del punto anterior, y por seguir subrayando la importancia de la inspiración y la creatividad a la hora de desarrollar un estilo propio, es importante que tengas un pequeño cuaderno (también un móvil o alguno de los soportes digitales que existen actualmente) donde ir anotando tus lluvias de ideas. Una idea surge en cualquier momento, observando cualquier cosa en cualquier lugar; de esta manera, cuando nos pongamos manos a la obra en nuestro estudio o en casa, podremos desarrollar esas ideas y darles forma.
Ilustración de @alex.demarcos
C. Mensaje
El arte no es algo que sólo entre por la vista o por los sentidos, es algo más profundo. Debe tener un mensaje más o menos claro. Si creamos dibujos, o cualquier otra obra, perfectamente realizados a nivel técnico pero que no tenga un mensaje, seguramente no calen.
El mensaje es ese impacto que producimos en las personas, lo que les hace pensar y que nos acaben recordando como artistas.
Puede ser un mensaje positivo, que transmita optimismo, amor o esperanza; pero también calan y hacen pensar aquellos dibujos con mensajes negativos. Lo importante es transmitir los sentimientos y emociones que realmente nos interesen.
D. Haz cosas nuevas
La monotonía no es una alternativa a la hora de inspirarse y dar rienda suelta a toda nuestra creatividad como artistas. Ahonda en terrenos poco conocidos. Come cosas nuevas para descubrir nuevos sabores, escucha otra música o ve películas de géneros que no te gusten y analiza profundamente por qué no te gustan, por qué no cuadran en ti o en tu personalidad. Para ello, es bueno escaparse de todo lo mainstream (lo que está más de moda).
E. ¡Arriésgate!
Si no, probablemente caigas en resultados monótonos y aburridos.
Cada uno llevamos algo distinto dentro. Huye de todas esas barreras emocionales que te impiden desarrollarte como artista con total libertad. Arriésgate a pesar de que ello pueda suponerte algún que otro fracaso: ese fracaso también será parte del camino y, seguramente, de tu éxito. No sigas las tendencias existentes porque sí, y a rajatabla, simplemente coge lo que te interesa de ellas para inspirarte y únelo a todo lo que te ha formado como artista.
F. No te compares
El estilo propio implica no compararse nunca. Hacer las cosas tal y como las sientes. Solamente de esta manera podrás llegar a ti mismo, que es precisamente lo más importante para que empieces a desarrollar un estilo propio en tus dibujos (o en otras disciplinas).
Ilustración de @alex.demarcos
Y hasta aquí el post de hoy. Si estás empezando en el mundo de la ilustración o estás pensando en perfeccionar la técnica que ya tienes, te recomendamos nuestro curso de ilustración básico o, si tienes claro que quieres aprender a dibujar personas, el curso de ilustración de retratos; ambos de Mundopiruuu, el autor de todas las ilustraciones que os hemos dejado a lo largo del post.
“Nace el artista cuando sus manos trabajan conectadas a su alma ”
Infante
Mitad de mi historia como artista y creo que me han ayudado mucho gracias por su post y les agradezco todo le saluda jared
Excelente